Si en el año 1992 Alone in the Dark marcó el inicio de los juegos de supervivencia, su nueva versión para la nueva generación pretende romper las reglas del terror de supervivencia, con una escalofriante historia de acción en el corazón de Central Park.
Corría el año 1992, cuando la compañía francesa Infogrames –hoy Atari-, presentó en sociedad un videojuego en tercera persona, que sin saberlo en aquel entonces, ayudaría a sentar las bases de lo que hoy en día conocemos como el género survival horror.
Controlando en su versión original a un protagonista masculino (Edward Carnby), o uno femenino (Emily Hartwood) a elección del jugador, Alone in the Dark presentaba un innovador sistema de juego en unas hoy “primitivas 3D”, que junto a una atmósfera de misterio, numerosos puzzles, cientos de monstruos y unas cámaras de juego que ayudaban a recrear la acción como si de una película de terror se tratase, lo convirtieron en una clásico y precursor de un género, que regresará catorce años después, con la sana intención de retomar el liderato perdido de los survival horror aprovechando la tecnología de hoy en día. No en vano, este nuevo Alone in the Dark contará con versiones para PC, Xbox 360 y PlayStation 3, y a juzgar por lo mostrado en las pocas imágenes, su vídeo teaser creado exclusivamente con el motor del juego, y una pequeña demo en la pasada E3, la cosa promete, aunque de verdad, asusta.
Luz, oscuridad y fuego jugarán un papel fundamental en esta aventura de terror que pretende combinar grandes dosis de acción con plataformas, miedo y un corte televisivo.
El detective Carnby viaja a Nueva York
Aunque sin su característico bigote y pajarita de hace 14 años, y un cuerpo mucho más musculado por sus monstruosos enfrentamientos en frecuentes fenómenos paranormales, el detective Edward Carnby volverá a ser el protagonista de esta nueva aventura de terror, que aunque en cierto modo relacionada con los inicios de la saga, estará mucho más enfocada a la acción.
Sobre su argumento, a excepción de que su desarrollo tendrá lugar en una catastrófica noche en el Central Park actúal de Nueva York, donde Carnby se encuentra investigando un caso, y que guardará relación con el título original, apenas se conocen detalles, e incluso incógnitas como la supuesta edad del protagonista y su aspecto (recordemos que el primer Alone in the Dark se ambientaba más o menos en los años 20, con lo que nuestro detective rondaría los 70 u 80 años), todavía le aportan un mayor halo de misterio.